Basada en las memorias reales redactadas en el Best-Seller de Elizabeth Gilbert: Eat, Pray, Love nos muestra un lado diferente de la realidad femenina, llega con muy poco realismo y de manera intermitente logra transmitir emociones y siembra ideas en el espectador sobre la banalidad y el egocentrismo; en concreto todo funciona bien, los diálogos, la historia, las actuaciones -no era de esperarse algo menos de Julia Roberts- sin embargo el film jamás se convierte en un evento memorable o algo que merezca ser visto dos veces. Lo mejor del film los paisajes y escenarios.
Cuando decide ver esta película, no estaba seguro de lo que me encontraría, y tengque confesar que no me la ví en el cine, sino en mi casa en dun dvd pirata debido a que la consideraba como una película que un hombre no debe ir a ver al cine sin la compañía de una amiga o novia, y no me equivoqué, el film esta destinado netamente a conquistar y emocionar al público femenino, ofreciéndoles una liberación, dándoles una alternativa a la monotonía de la vida en la que seguramente muchas se sienten atrapadas. Sin embargo desde mi punto de vista, el film no logró ni cercanamente al objetivo anterior, ya que al final del film se tiene la senaación de haber asistido a una historia interesante pero que no hace algo más alla de consumir tiempo y sólo eso.
Entonces, en primer lugar tenemos a los escenarios, India, Bali, Italia, en fin, es una de las razones que invitan a observar la película, las imágenes parecen sálidas de paraísos lejanos, como los que prepara una agencia de viajes. Al parecer esto de usar el gancho de visiones turísticas en los films está de moda, recordemos a Letters to Juliets, y está funcionando porque es gracias a esto que las falencias del film se hacen menos notorias en ciertos momentos. Después, otro punto a parte lo merece la historia, y es que la historia es una de las más difíciles de criticar resultado de lo complejo de su trama, por qué? Pués en el camino de "auto-descubrimiento" de la protagonista, su conducta revela más a una mujer mesquina, libidinosa y egocentrista que a una mujer atrapada en la rutina y desesperada, una historia que desde un punto de vista neutral da suficiente material para una película como esta, pero que no merece aplauso alguno; y es que si la idea del film es vender a Liz como una mujer trabajadora y amante y buena, digna de ser canonizada, el enfoque que se le da dice de ella todo lo contrario, a mi parecer debió ser marqueteada más como la historia de una mujer más individualista y de pocos sentimientos que finalmente decide abandonar a su familia sin sentir remordimiento de ello; le hacen compañía los países que visita y ciertos momentos en los que transmite sentimientos encontrados entres rechazo y lástima, aunque momentos absurdos y previsibles -como el "casual encuentro" entre Julia Roberts y Javier Bardem- que abundan en el film, logran tirar tiodo al traste de nuevo.
El guión por su parte estuvo muy limpio, sin grandes momentos o frases memorables, pero con suficiente elegancia para no caer en lo aburrido an ningún momento del film, algo notable seria quizas el exceso de malas palabras que usualmente no acompañan a este tipo de películas. El momento más emotivo es quizas cuando el esposo le suplica que se quede con él a Liz pero ella simplemente le dice que no puede y se marcha, cosa que se revela luego como un evento de la imaginación de Liz que no tuvo el valor para enfrentarlo. La espiritualidad quedó muy bien adaptada -la esencia de las religiones- en el guión, las oraciones de la escritora en India son de los pocos momentos que resaltan.El final tampoco sorprende ni gusta, pero eso repito desde un punto de vista personal, y es quizas porque las producciones nos tienen acostumbrado a observar como las personas que se equivocan pagan duramente esos errores, y esto es algo que no ocurre en el film.
Las actuaciones son rescatables en su gran mayoria. Julia Roberts es sinónimo de cuidado y respeto y es el reflector principal de este film, y si bien es cierto su actuación no me convenció del todo, lo logró compensar muy bien con su refrescante imagen y aquel ángel que la caracteriza; también es de considerar que el papel no es muy fácil de asimilar, pués presentó mucho conflictos de tipo moral, tanto para el actor como para el personaje. Javier Bardem revivió la actuación de seductor empedernido de Vicky Cristina Barcelona, sólo que en esta ocasión le agrega un destello de sujeto más familiar, no obstante tampoco termina de convencer, su actuación por momentos se vuelve plana, como si esperara que su sonrisa lo hiciera todo. Richard Jenkins, que interpreta a un texano de vacaciones, es quien merece una ovación, pues su puesta en escena y el tiempo que duró implicaron también los momentos mas realistas de Eat, Pray, Love.Para terminar:
Lo Bueno: Los escenarios que dan un deleite visual durante el film, Julia Roberts y su imagen refrescante, y el hecho que el film aporta una visión distinta de lo que se considera correcto.
Lo Malo: La obra parece haberles quedado grande casi a todos, director, guionistas, actores -con sus excepciones- en fin, lo que pudo haber sido un suceso terminó muestra de lo que no se debe hacer con un Best-Seller.
Puntuación: 5/10: No vale la pena gastar la entrada en ella, preferiblemente observarla en casa y no más de una vez.
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