domingo, 29 de mayo de 2011

Crítica: Caperucita Roja No Enamora

Red Riding Hood
 'Red Riding Hood' culmina como una bastante genérica y anémica variación de Twilight sin vampiros. La cinta posee una historia bastante endeble, pese a tener como base uno de los cuentos más reconocidos universalmente, continúa con un desarrollo que no le aporta ni le empobrece y un final que en algo quiere contribuir. Sin historias auxiliares, con algunas actuaciones terribles y descansando completamente en la apenas interesante historia romántica central, La Chica de la Capa Roja tiene como mejor mérito la fotografía e iluminación... Un film que no es lo peor que se ha hecho, pero que no se debe repetir. 
Red Riding Hood
Como antecedente tenemos que las cintas sobre hombres lobos no suelen ser muy queridas por el público -esto no refleja la calidad de un film por cierto-; así tenemos cintas como The Wolfman, Cursed, Wolf, y otros, sin embargo el mito sobre el hombre-lobo es uno sobre los cuales se puede trabajar más y si tiene a la fábula de caperucita roja de por medio es mucho más prometedor. En cambio los romances juveniles sobrenaturales siempre son al menos una apuesta segura como el todopoderoso Crepúsculo que fue el que causó el boom y hasta los menos aclamados I Am Number Four, Beastly gracias al atractivo que les da el mundo de fantasía donde se desarrolla que permite desarrollar historias interesantes con facilidad. Red Riding Hood llegaba con buenas promesas por su apelativo juvenil, el sentido obscuro de la historia, el nombre de la directora de Twilight en su plantilla, Catherine Hardwicke, y la multifacética estrella en ascenso Amanda Seyfried, quizás con un aire de otros éxitos de esta línea como Sleepy Hollow o Bram Stoker's Dracula.
Red Riding Hood
 El inicio de la historia es algo frió, no genera dudas, no explica lo que se viene y se enfoca únicamente explicar el origen del romance entre los protagonistas, la narrativa es insinuante y por un momento creí escuchar a Carrie de Sex and the City. Después comienzan a introducirse en la mística del lobo, pero en ningún momento el cuento infantil toma un papel relevante, se olvidan incluso del lobo y acaban convirtiendo la trama prometedora en una burda telenovela medieval. Lo peor de la historia es que se corta bastante y no avanza mucho por varias escena durante la primera mitad, después intenta salvar algo con la adición del misterio familiar -al que casi nada de atención se le prestó- y la cacería de brujas que comienza en el pueblo -a la que tampoco se le dedico el tiempo que merecía-; ya al final dio un giro en dirección opuesta a lo que parecía sería extremadamente cursi y predecible, el parricidio y el amor maldito fueron elementos que se salieron del esquema frígido y erótico que se había mantenido casi toda la historia.
Red Riding Hood
 Los personajes son un fracaso, basan su existencia únicamente en el romance -por no decir el erotismo- y hacen a la historia parecerse más a The Count of Monte Cristo o Carmen que a una fábula de corte dark. Caperucita nunca es caperucita, al igual que la contraparte masculina no poseen una identidad clara, pese a tener los papeles mas importantes son personajes de oropel, vacíos. Los personajes secundarios no son mucho mejor, el herrero, la familia de caperucita tienen algo más de solidez, pero tampoco poseen esencia. El personajes más elaborado de todo el pequeño mundo místico es el sacerdote trastornado, es el que anima gran parte del film. Las historias auxiliares están ausentes, la trama principal no tiene respaldos -que sí pudo haber tenido-, la historia más fuertes fueron la traición que sufriera caperucita por su amiga y pare de contar, pero muchas sub-historias pudieron haberse desarrollado más y complementar así la película.
Red Riding  Hood
 Amanda Seyfried me decepcionó mucho, no se mostró ni remotamente cercana a la hermosa y carismática jovencita que logró sacar a flote cintas como Letters to Juliet o Dear John y convertirlas en films decentes. Seyfried se ve bastante limitada por su personaje, es cierto, pero no logra transmitir alguna emoción más allá de la lujuria en ciertas escenas, en el resto parece no querer ser parte del film. Del resto del elenco el único con experiencia en cine es Gary Oldman que hace una aceptable interpretación como el sacerdote recién llegado a la aldea, los demás son jóvenes actores no conocidos como Max Irons o Shiloh Fernandez que hacen poco con sus roles de adolescentes encontrados por el amor de la hermosa Seyfried,y Billy Burke que tiene una corta carrera actoral en la gran pantalla se desempeña de forma decente como padre de caperucita, aunque tampoco hace un gran trabajo.
Red Riding Hood
 Conclusiones:

 Lo mejor del film: Los últimos cinco minutos son algo interesantes, sin llegar a ser algo extraordinario.

 Lo peor del film: Amanda Seyfried y su tropezón en su carrera de buenas actuaciones.
Red Riding Hood
 Calificación: 4.5/10: Aburrida en casi toda su extensión, con pocas luces de originalidad, no se justifica el gasto de verla en el cine.

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